En el caudaloso río Magdalena, sobre el puente Mariano Ospina Pérez del municipio de Girardot, Cundinamarca, los alumnos del Curso de Lanceros No. 501 y 502, realizaron La «Noche del Lancero», donde los alumnos enfrentaron miedos y realizaron pruebas individuales y colectivas para fortalecer su espíritu de cuerpo y vocación militar.
Fueron muchas horas donde los 80 alumnos adelantaron diferentes ejercicios técnicos y tácticos que pusieron al límite su esfuerzo físico, mental y psicológico, en su mayoría de supervivencia de combate en agua para afianzar el coraje en ambientes hostiles o de peligro.
Estas pruebas iniciales del curso están dirigidas por instructores altamente preparados, capacitados bajo los más altos estándares doctrinales del Ejército Nacional, en el cual se espera tener los mejores líderes de pequeñas unidades con la capacidad de planear, preparar, ejecutar y evaluar la misión.
El ejercicio contó con la presencia del teniente coronel David Alfonso Gaitán Ruíz, comandante de la gloriosa y única Escuela de Lanceros quien participó de algunas pruebas como parte de la motivación y liderazgo ante los alumnos, evidenciando la tenacidad que debe tener el Lancero colombiano.
Autor: prensa CENAE