Por aire y luego por río, fueron movilizados estos elementos los cuales servirán para mejorar las condiciones de los niños de cuatro comunidades indígenas. Estás sillas estudiantiles fueron fabricadas en plástico reciclado por la multinacional Hewlett-Packard.
Un vuelo desde Bogotá de la Fuerza Aérea Colombiana durante cerca de dos horas, un recorrido de cerca de 20 millas náuticas por las aguas del río Amazonas en embarcaciones de la Armada de Colombia y coordinaciones desplegadas por la Brigada 26 del Ejército Nacional, fueron necesarios para que llegaran a cuatro comunidades indígenas de la zona rural de Leticia, más de 200 sillas estudiantiles e igual número de kits escolares.
Esta actividad social, realizada en coordinación con la Fundación Recupera Tu Silla, tiene como objetivo contribuir al mejoramiento de las condiciones locativas de los recintos estudiantiles para niños, niñas, jóvenes y adolescentes que actualmente adelantan sus estudios de primaria y secundaria.
Las comunidades indígenas de Santa Sofía, Maloca Yagua, Loma Linda y el Progreso, aguardaban este apoyo desde hace varios meses, ya que algunas sillas presentaban afectaciones generadas por el pasar de los años, y los pequeños debían recibir sus clases con incomodidades.
Ante este panorama, las Fuerzas Militares, en un esfuerzo conjunto, unieron sus capacidades, y, con la Fundación, articularon el poder cumplir el sueño de los niños y niñas indígenas, de poder contar con pupitres y cuadernos nuevos que les permitieran recibir sus clases con comodidad, contribuyendo así al bienestar estudiantil.
Las comunidades, recibieron emocionadas esta donación, y como muestra de agradecimiento realizaron una serie de muestras culturales y ritos propios de sus costumbres a los miembros de las Fuerzas Militares y de la Fundación.
Estás sillas estudiantiles fueron fabricadas en plástico reciclado por la multinacional Hewlett-Packard lo que representa un importante aporte al cuidado del medio ambiente ya que se emplearon materiales que iban a ser desechados, pero que en esta ocasión tuvieron una segunda oportunidad de servir, y que mejor forma que para contribuir a la educación de los ciudadanos del mañana.
Esta donación juega un papel fundamental en la mejora de la educación de las comunidades, toda vez que proporciona a sus estudiantes beneficiados un entorno físico más adecuado para su aprendizaje. El contar con este nuevo mobiliario adecuado no solo garantiza comodidad durante las clases, sino que también, les permite concentrarse mejor en sus estudios. Un pupitre y una silla son claves para evitar distracciones causadas por el malestar físico, permitiendo así una mayor participación y rendimiento académico, así como prevenir la deserción escolar.
También contribuye a la igualdad de oportunidades en el ámbito educativo, y asegura a sus estudiantes, sin importar su contexto socioeconómico, tener las mismas condiciones básicas para aprender, vital para promover un entorno educativo inclusivo y equitativo.
Las Fuerzas Militares continuarán desplegando sus capacidades logísticas y de gestión con el objetivo de contribuir al bienestar y mejoramiento de la calidad de vida de los niños, niñas, jóvenes y adolescentes de las comunidades más alejadas.
Autor: Comunicaciones EStratégicas COGFM