Con reflectores, sonido y perifoneo terrestre buscan que los cuatro niños se guíen y puedan ser localizados en la operación Esperanza.
Con estos orientadores visuales y auditivos los cuales fueron ubicados en puntos estratégicos, se pretende que los menores observen y escuchen en las oscuras noches esas luces y sonidos para que puedan llegar hacia las tropas o realizar algún tipo de señal que permita ubicarlos.
Con unos potentes reflectores que serán encendidos en las noches, cabinas de sonido y perifoneo terrestre por los cuales se emitirán mensajes en medio de la espesa selva virgen donde celulas combinadas de búsqueda de las Fuerzas Militares e indígenas adelantan labores para localizar a los menores, las autoridades esperan y confían en que sirvan como elemento que ayude a los menores a ubicar a quienes están tras sus huellas.
Esta nueva iniciativa que tendrán la Fuerzas Especiales en la zona de búsqueda en límites entre Caquetá y Guaviare, será implementada durante el día y la noche para que los cuatro hermanitos observen o escuchen y así realicen alguna señal para llegar a ellos o que puedan acercarse a los puntos en donde se encuentra la tropa.
Estos orientadores visuales y auditivos llegaron a los sitios, a bordo de helicópteros del Ejército Nacional, y son puestos en funcionamiento con la ayuda de plantas eléctricas y sin duda serán una herramienta fundamental en el desarrollo de la Operación Esperanza.
Estas luces, cabinas de sonido y equipos de perifoneo terrestre podrán ser observadas y escuchados a distancias superiores a los 500 o mil metros y por su potencia fácilmente podrán verse y oírse a través de las ramas y tallos de los árboles.
En la zona de búsqueda continúan los más de 110 Comandos de las Fuerzas Especiales y los cerca de 80 indígenas, tras la pista de los cuatro menores que hoy completan 29 días desparecidos en esa espesa selva del suroriente del país.
Autor: Comunicaciones Estratégicas COMES COGFM