En la operación se encontraron más de 670.000 galones de crudo hurtado. Estas refinerías han causado un daño ambiental devastador.
En las últimas horas, en un trabajo articulado entre el Ejército Nacional, la Fuerza Aérea y la Fiscalía General de la Nación, se lograron ubicar e inhabilitar siete refinerías ilegales con más de 670.000 galones de crudo hurtado en la zona rural del municipio de Tibú, Norte de Santander.
Los militares llegaron hasta la vereda Caño Victoria, donde se hallaban estas refinerías dedicadas a destilar gasolina procesada, conocida como Pategrillo. El crudo encontrado en esta zona había sido hurtado del oleoducto Caño Limón-Coveñas.
En el lugar se evidenció una grave afectación al suelo, las fuentes hídricas y el bosque.
Estas refinerías, que tendrían un valor de más de 5000 millones de pesos, albergaban más de 670.000 galones de crudo, 18 piscinas artesanales de almacenamiento y otros elementos utilizados para cometer este delito.
En esta zona del departamento tiene injerencia el ELN, por lo que se presume serían los responsables del hurto al oleoducto.
El Ejército Nacional continúa adelantando operaciones que permitan contrarrestar los factores de inestabilidad que afectan la región.
Autor: Ejército Nacional de Colombia- Prensa Segunda División.