Con un sentido acto, en el cerro Gualí, los soldados que prestan el servicio militar, recibieron los frailejones como muestra de la responsabilidad de proteger la vida del páramo. A fin de conmemorar el Día del Agua, la Octava Brigada del Ejército, se dio cita en la base militar Gualí, junto a las autoridades departamentales y la comunidad.
Hasta el lugar llegó el Secretario de Gobierno de Caldas y de Villamaría, la secretaria de medio ambiente de Caldas, delegados del Sena y de Corpocaldas, niños de la institución educativa Nuestra Señora del Rosario, sede Aspar, Laguna Negra Nevado del Ruíz y comunidad vecina del páramo, con el objetivo de proyectar y articular acciones entre las instituciones y las comunidades, en pro de la conservación y protección del páramo y la biodiversidad caldense.
Dentro de la jornada, el soldado Franklin Neira, quien desde hace 19 años le sirve a Colombia con vocación militar y hace seis de su carrera militar ha trabajado sin descanso en el proyecto piloto de germinación y reproducción de los frailejones en Caldas, exhortó a las nuevas mujeres soldados a apostarle a esta misión de velar por los viveros, haciendo entrega de frailejones, que representan la preservación del recurso hídrico.
Los soldados a su vez, asumieron el compromiso de continuar un legado de protección de la vida y junto a niños y comunidad del páramo, recibieron los frailejones, vitales para la conservación y del Páramo y sus alrededores. Fue este un momento muy emotivo para crear un mensaje de unión y solidaridad con los páramos, que nos proveen del líquido vital para la humanidad.
El generar conciencia de este proyecto experimental y semillero implementado en la zona por el soldado Neira y la necesidad de ser tecnificado, le dieron paso a la experiencia de contemplación de la semilla y las diferentes etapas del vivero. Para mantener la biodiversidad, germinar plantas en vía de extinción y reforestar la región, los soldados desde las bases militares han implementado siete viveros, que se encuentran ubicados en las bases militares del corregimiento de San Félix, Gualí, La Esmeralda, Subestación, Cañaveral, El Mirador y El Bosque.
Además, en ésta unidad ubicada en la capital caldense, están trabajando y tecnificando un invernadero que tiene proyectado germinar al mes 1.500 árboles nativos de la región.
Este año, los soldados del Batallón Ayacucho con acciones interinstitucionales han sembrado más de 3.900 mil árboles; además de estar produciendo, a través de los viveros forestales, más de 10 mil especies entre frailejones, palma de cera, caucho y otras nativas de la región.
Así mismo, se trabaja de manera conjunta, coordinada e interinstitucional para sumar a la preservación del medio ambiente a través del ataque a los motores de deforestación, minería ilegal y tráfico de fauna y flora.
El Batallón Ayacucho de la Octava Brigada continuará desarrollando alianzas interinstitucionales, estudios y avances que les permita a los y las soldados y a la comunidad de las diferentes subregiones, conocer, proteger y aprovechar la biodiversidad caldense, además de documentar el proceso para futuras generaciones.
Autor: prensa - Ejército Nacional