Con el hallazgo e inutilización de estas unidades de producción minera, se evita que se extraigan mensualmente cerca de 1,3 kilogramos de oro y 13,5 toneladas de arenas negras y minerales.
Estructuras artesanales con maquinaria y equipos para la extracción ilícita de yacimientos mineros fueron destruidos por unidades de la Armada de Colombia, el Ejército Nacional, la Fuerza Aérea Colombiana y la Policía Nacional, durante el desarrollo de operaciones ofensivas contra las estructuras ilegales responsables de la afectación a los recursos naturales del país en aguas del río Atabapo, en el departamento de Guainía.
Las operaciones se desarrollaron entre las comunidades de Playa Blanca y San Juan, hasta donde llegaron unidades del Batallón Fluvial de Infantería de Marina Nº.50 con miembros de la Fuerza Pública, para neutralizar y destruir tres unidades de producción minera que se encontraban en funcionamiento sin contar con los permisos necesarios.
Al interior de las tres estructuras, se encontraron equipos e insumos utilizados comúnmente para la extracción ilícita de yacimientos mineros tales como motores diésel, bombas de succión, compresores, motobombas, mangueras, equipos de buceo, 9,5 gramos de mercurio, seis embarcaciones metálicas, entre otros elementos.
Se estima que el costo de estas unidades de producción minera podría alcanzar los 240 millones de pesos y con su hallazgo e inutilización se evita que se extraigan mensualmente cerca de 1,3 kilogramos de oro y 13,5 toneladas de arenas negras y minerales como estaño, tantalita, entre otros; negándole a las economías ilegales el ingreso aproximado de 607 mil millones de pesos mensuales.
Las infraestructuras fueron destruidas en el lugar de los hechos, dando cumplimento a los protocolos establecidos para la protección del medio ambiente; mientras que el material incautado fue puesto a disposición de las autoridades competentes.
Cabe resaltar que con este esfuerzo operacional se evita la contaminación de los ríos a causa de químicos tóxicos como el mercurio. Así mismo, se evita la destrucción de hábitats fluviales, sedimentación excesiva por la remoción de lecho de los ríos que afecta la calidad del agua y vida de las comunidades; además de la deforestación, erosión y pérdida de vegetación ribereña.
La Armada de Colombia, a través de la Fuerza Naval de la Orinoquía, continuará desarrollando operaciones conjuntas y coordinadas que permitan contrarrestar la explotación ilícita de los recursos no renovables en esta zona del país, reafirmando su compromiso con la protección y preservación del agua, la biodiversidad y el medio ambiente en la región.
Autor: prensa – armada de Colombia