Esta unidad se destaca por ser la encargada de brindar seguridad a los habitantes de los municipios de Coyaima, Ataco, Dolores, Alpujarra y Natagaima.
En el campo de paradas del Cantón Militar del sur del Tolima, se llevó a cabo la ceremonia de transmisión de mando del comandante del Batallón de Operaciones Terrestres No.17 COZEU, de la Sexta Brigada del Ejército Nacional, donde el teniente coronel Carlos Antonio Malaver Poveda entregó la unidad al teniente coronel Edwin Giovanny Fandiño Forero, quien ahora estará a cargo de la seguridad de cinco municipios del suroriente del departamento del Tolima.
Es de resaltar que, de las acciones realizadas por esta unidad durante el último año y medio, se destacan el sometimiento a la justicia de dos integrantes del Grupo Armado Organizado residual, GAO-r, 40 capturas por delitos relacionados con la delincuencia común, narcotráfico y economías ilícitas. Además, se incautaron grandes cantidades de estupefacientes y artefactos explosivos, se recuperaron semovientes y se realizaron capturas e incautaciones relacionadas con la explotación ilícita de yacimientos mineros. También se llevaron a cabo controles constantes en la vía nacional que conduce de Natagaima a Neiva, en el corredor vial secundario Coyaima-Ataco, y en el área rural de los municipios de Dolores y Alpujarra.
El Comandante saliente ha sido designado como Comandante del Batallón de Infantería No.42 Batalla de Bomboná.
Perfil del nuevo comandante
El teniente coronel Edwin Giovanny Fandiño Forero es oriundo del municipio de Charalá, Santander. Es profesional en Ciencias Militares y magíster en Seguridad y Defensa.
El oficial, perteneciente al Arma de Ingenieros, ingresó al glorioso Ejército Nacional en 2002, y ha formado parte de las unidades BIOSP, BIRAN, Grupo Marte Omega, Grupo Marte DIV3, BACOT 127, BIDEEH6, DIM 38 y DIROP.
Para el teniente coronel Fandiño, asumir como comandante del Batallón de Operaciones Terrestres No.17 significa, como soldado, una responsabilidad y compromiso con la institución y su país. Es un sueño hecho realidad después de 22 años de carrera militar, un peldaño más, un reto, una gran oportunidad y una forma de expresar sus capacidades y habilidades. Este puesto le permitirá materializar fortalezas para el cumplimiento de la misión institucional, ya que liderar esta unidad militar implica poner en práctica un sinfín de conocimientos y experiencias recogidas a lo largo de su vida. Sin duda, será motivo de orgullo para su familia y obtendrá el reconocimiento de todo el personal bajo su mando.
Autor: Prensa - Quinta División del Ejército Nacional