En medio de la ofensiva operacional, también se logró desmantelar una red de comunicaciones, la captura de varios delincuentes y la incautación de armamento escondido en un depósito ilegal.
Producto del fortalecimiento de la política institucional de seguridad enmarcada en el Plan Diamante y en desarrollo de operaciones militares en contra del Clan del Golfo, se produjeron cuatro importantes resultados en el noroccidente de Colombia.
El primer hecho se dio en zona rural de Canalete, Córdoba, donde fue desmantelada una red de comunicaciones que tenían los criminales para la coordinación de narcotráfico y acciones delictivas.
El resultado se produjo en la vereda Plan Parejo, hasta donde llegaron los uniformados que iban en la búsqueda de una central, en donde con antenas y de manera rudimentaria amplificaban la señal de radioteléfonos empleados por ese grupo armado organizado.
En medio del hecho, los criminales atacaron a los militares. En el intercambio de disparos, seis personas fueron capturadas, entre ellas una resultó herida a quien los enfermeros militares de combate le brindaron los primeros auxilios. A estos individuos les hallaron cinco pistolas, tres granadas de mano, munición de diferentes calibres, así como ocho radios, una antena elevada, motocicletas y otros elementos empleados por los bandidos en esa red.
Así mismo, en la zona rural de Zaragoza, tropas de la Séptima División del Ejército Nacional lograron el rescate de 17 funcionarios de EPM que habían sido secuestrados por criminales del Clan del Golfo.
El hecho se produjo en el corregimiento El Pato, donde los uniformados de la Brigada 11, guiados por información de Inteligencia Militar, lograron ubicar el sitio donde intentaban esconder a los empleados y huir de las operaciones que allí se adelantaban para rescatarlos.
El plagio se habría producido cuando los empleados adelantaban labores técnicas y obras en la región. Según se pudo establecer, por su liberación los delincuentes exigían una gruesa suma de dinero.
Enterados de este hecho, se activaron todos los protocolos de seguridad para atender esta clase de situaciones y con la Red de Participación Cívica se comenzó un rastreo por los diferentes sitios por donde posiblemente intentarían conducirlos. Fue así como se logró localizarlos y de inmediato fueron enviados a esa área tropas por aire y tierra, quienes aprovecharon la noche y lograron infiltrarse.
Los bandidos al sentir la presencia de los uniformados abrieron fuego. En el intercambio de disparos uno de los ilegales resultó herido y fue abandonado por sus compañeros quienes de inmediato emprendieron la huida. Enfermeros militares de combate le brindaron los primeros auxilios y lograron estabilizarlo. Un integrante más de ese grupo armado organizado fue capturado.
En este hecho se logró la ubicación e incautación de una ametralladora M-60, cuatro fusiles AK-47, una pistola y 20 kilos de pasta base de coca.
Tras verificar el estado de los 17 contratistas de EPM se pudo constatar que estaban bien de salud y sin ninguna herida o lesión. De inmediato fueron sacados del lugar y trasladados a una zona segura donde pudieron comunicarse con sus familias y confirmarles la buena noticia de su liberación.
Posterior al rescate y captura de los dos bandidos, se obtuvo una importante información. Cerca al lugar de los hechos el Clan del Golfo tendría un depósito ilegal en donde estarían escondiendo, en canecas y bajo tierra, material de guerra.
Luego de evaluar las medidas de seguridad, fueron hallados 20 fusiles, una ametralladora Calibre 7, 62 mm, tres morteros de 60 mm, una subametralladora, 84 kilos de explosivos, cerca de 8.000 cartuchos para fusil de diferentes calibres, ocho granadas de fragmentación, así como repuestos y piezas de armamento.
Por último, en el corregimiento de Juan José, zona rural de Puerto Libertador, Córdoba, se produjo la captura de tres delincuentes que estarían involucrados en la planeación y en el asesinato de los líderes sociales Plinio Pulgarín Villadiego (miembro de la Asociación de Campesinos del Sur de Córdoba y de la Junta de Acción Comunal de la vereda San Pedrito de San José de Uré Córdoba - enero de 2018), Luis Alberto Rolle Franco (presidente de la JAC de Santa Isabel de San José de Uré, marzo de 2018) e Iván de Jesús Lázaro (julio de 2018).
Los criminales, entre ellos una mujer, fueron identificados con los alias de Niño Grande, El Paisa y La Caballona, quienes fueron dejados a disposición de las autoridades competentes para su respectivo proceso de judicialización.
Con estos cuatro importantes resultados, el Ejército Nacional afecta de manera significativa las finanzas ilegales, así como el aparato criminal del Clan del Golfo, lo que permite disminuir y menguar sus estructuras logísticas y delictivas.
En la zona donde se presentaron los hechos continúan las operaciones militares con el objetivo de ubicar y localizar a los criminales que habrían perpetrado el secuestro de los 17 funcionarios de EPM.
Fuente: Ejército Nacional