La Escuela de Instrucción Militar Aérea, ubicada en el Comando Aéreo de Combate No. 1, fue el epicentro para celebrar el nonagésimo séptimo aniversario de la Especialidad de Seguridad y Defensas de Bases Aéreas, para lograrlo se realizaron diferentes actividades que resaltaron las capacidades tácticas con las que cuenta la especialidad.
De esta manera, y ante el horizonte que se apresta, se reunieron los comandantes de todos los Grupos de Seguridad de la Fuerza Aérea Colombiana, junto a sus comandantes de escuadrones y mentores tácticos para recibir un taller de entrenamiento, el cual proyectó la incorporación del Soldado Profesional a la Institución, un nuevo reto que se debe realizar con mayor especialización, eficacia, demostrando un excelente nivel de entrenamiento, control y autonomía institucional.
De igual manera, durante cinco días, se realizaron las Olimpiadas de Seguridad y Defensa de Bases, competencias creadas con el fin de integrar al personal de la especialidad, en un espacio de trabajo en equipo, liderazgo y capacidades con las que cuenta cada Unidad Militar Aérea; aquí se realizaron exigentes pruebas de entrenamiento físico, que incluyeron, ejercicios de tiro, paso de pistas y orientación militar, entre otros. Este año los campeones y quienes custodiarán la llama de esta justa militar es el Grupo de Seguridad No.65, ubicado en el Comando Aéreo de Combate No. 6.
Finalmente, se realizó una solemne ceremonia militar, presidida por el señor Mayor General Carlos Fernando Silva Rueda, Segundo Comandante y Jefe de Estado Mayor de la Fuerza Aérea Colombiana, donde se reconoció la loable labor de Oficiales y Suboficiales, mediante la imposición de diversas órdenes y medallas militares como la de Fe en la Causa, la Marco Fidel Suárez, a los Servicios Distinguidos a la Seguridad y Defensa de Bases Aéreas, a los Servicios Distinguidos al Cuerpo Logístico y Administrativo entra otras.
Es de esta manera, como su Fuerza Aérea Colombiana, rinde homenaje a la Especialidad de Seguridad y Defensa de Bases; sus integrantes con vocación de servicio han forjado la historia durante estos 97 años, contribuyendo a su crecimiento con determinación, valentía e ímpetu inquebrantable para continuar brindado seguridad y protección a la Fuerza Aérea y a todos los colombianos.
Un poco de historia
En 1927 empezó el trascender de esta especialidad que fue creciendo a medida que la Fuerza Aérea Colombiana se desplegaba para dominar el espacio aéreo y la geografía colombiana, convirtiéndose en un pilar fundamental de las operaciones aéreas. Es así como inicia a adquirir más habilidades, fortalezas y responsabilidades.
La Institución registra que el primer salto de paracaidismo fue en 1930, luego en 1950 se creó la Policía Militar Aérea, en 1960 iniciaron los Grupos de Instrucción Militar para Soldados y en 1968 ingresó a la Escuela Militar de Aviación el curso No.46, el cual ascendió a los primeros cinco oficiales de este linaje, continuado a la década de los 80, cuando se crearon los Grupos Antisecuestro de Aeronaves GASDA, y después de allí se iniciaron otros cursos como el de Tirador Escogido de Plataforma, Técnicos explosivos, Fuerzas Especiales, Equipos de Protección de Personajes, Rescatistas, Operadores de Drones, Guías Caninos, entre otros.
Es por esta necesidad fehaciente de instruirse en las anteriores capacidades, que la Escuela de Instrucción Militar Aérea, alma máter de la especialidad de Seguridad y Defensa de Bases desde hace 20 años ha graduado a más de 15.500 hombres y mujeres, en los que están incluidos no solo personal de las Fuerzas Militares de Colombia y Policía Nacional, sino también de Fuerzas Militares de países hermanos como Chile, República Dominicana, Guatemala, entre otros.
Un nuevo horizonte
La Fuerza Aérea Colombiana abre una nueva modalidad de incorporación como Soldado Profesional y la especialidad de Seguridad y Defensa de Base se apresta para brindar la instrucción para continuar protegiendo el componente físico del poder aéreo, espacial y ciberespacial.
El personal de esta especialidad tendrá la tarea de inculcar, en el pensamiento y esencia de los jóvenes que voluntariamente se inscribieron, la pasión por el servicio, el liderazgo, la lealtad, la determinación y la persistencia de quienes defienden a la nación desde el poder legítimo del Estado Colombiano.
Autor: Oficina de Comunicación Pública CACOM 1