La campaña antiextorsión busca hacer pedagogía e invitar a los ciudadanos a que denuncien a las líneas 147 del Gaula Militar, o 165, del Gaula Policial.
Luego de realizada la denuncia, el ciudadano recibe inmediata atención de un agente experto que evitará que la víctima pierda su dinero y tranquilidad.
El Ministerio de Defensa Nacional lanzó una campaña digital para que la ciudadanía conozca las diferentes modalidades de extorsión, con el fin de denunciar y recibir el adecuado acompañamiento de los Gaula –Grupos de Acción Unificada por la Libertad Personal, Militar y Policial–, ya que más del 90 por ciento de los casos denunciados, son resueltos de manera exitosa.
Según el teniente coronel David Felipe Ciro, subdirector de los Gaula Militares, la extorsión es un “círculo vicioso” que no se soluciona con un pago porque el delincuente, cuando el ciudadano paga, lo que hace es seguir con la cadena de extorsiones. Es por ello, que los Gaula se encargan de asesorar para que el ciudadano tenga la capacidad de reaccionar ante esa situación.
En octubre se presentó una disminución del 6 por ciento, con el registro de 795 casos, mientras que, en el mismo mes del año anterior, se registraron 843. Sin embargo, en lo corrido del año en Colombia este delito ha aumentado 9 por ciento, ya que, según las autoridades, el mundo cibernético ha facilitado que los delincuentes obtengan la información básica de la víctima, por lo que expertos advierten que todo comienza por la prevención.
“Muchas veces publicamos en redes sociales información valiosa para la delincuencia, incluso los negocios tienen un registro de Cámara de Comercio que lamentablemente es público; por ahí el delincuente puede tener el nombre de su víctima, número de cédula, dirección y nombre del negocio, y desde allí parte para hacerle creer a su víctima que sabe todo de él”, explica el mayor Mauricio Medina, jefe de la Unidad de Prevención del Gaula Militar.
Una vez que el Gaula toma contacto con la víctima, lo primero que hace es conservarle la calma, dado que los delincuentes saben entrar en la cabeza de su víctima para sacar información que será de utilidad en la siguiente llamada, para demostrar que conocen todo de su vida.
“Lo primero que hacemos al asesorar a la víctima, es tranquilizarlo y explicarle que es víctima de una modalidad. El problema es cuando la víctima se encierra en su propia pesadilla, porque cree en todo lo que dicen sus victimarios”, asegura el mayor Medina.
Existen diferentes modalidades de extorsión, muchos de ellos no requieren de presencialidad, sino por el contrario, con una llamada o mensaje de texto, los delincuentes presionan a su víctima para sacarles dinero.
A continuación, exponemos las modalidades de extorsión más comunes que se registran en Colombia:
Modalidad de Falso Servicio:
En esta modalidad, los delincuentes realizan una llamada a comerciantes que prestan un servicio como, por ejemplo, un carpintero. Lo contratan para que vaya a hacer un trabajo fuera de la ciudad o del pueblo, de acuerdo con la región.
Cuando este llega al punto, encuentra que la dirección no existe, recibe la llamada de los sujetos que se identifican como un grupo al margen de la ley, y le dicen que en ese momento lo tienen rodeado, lo están apuntando, y que no haga ningún movimiento.
Posteriormente, hacen o piden la llamada de un familiar, momento en que se consuma la extorsión, puesto que lo llaman y dicen que lo tienen secuestrado.
Modalidad Carcelaria:
Es cuando estos delincuentes utilizan un libreto muy bien estructurado, realizan desde la cárcel la llamada a las víctimas, y normalmente, se identifican como grupos al margen de la ley para hacer exigencias como material de intendencia, comunicaciones y drogas, entre otras.
Normalmente es un material que no se consigue fácilmente, con el fin de que se le manifieste al victimario la imposibilidad de conseguir el material. Toda esa sicología y libreto, es con el fin de que la víctima consigne.
Modalidad Clásica
Esta modalidad es realizada por grupos al margen de la ley, por medio de una citación a la víctima en un lugar de su injerencia, para que, por medio de un documento, o inclusive por una llamada haya una exigencia económica y se le permita a la víctima continuar en sus negocios o empresas.
Modalidad Mínima Cuantía
Es cuando grupos al margen de la ley hacen una exigencia económica de mínima cuantía en un sector del comercio. Es decir, por ejemplo, al que distribuye los huevos, les cobran $500 por cubeta, para ejercer su actividad en el área comercial, ya que los delincuentes aseguran es de su injerencia. Sin embargo, en realidad, al sumar las pequeñas cantidades, se convierten en altas sumas de dinero.
Modalidad Sexting
Normalmente se da a través de redes sociales, donde las víctimas, en su mayoría, son menores o muy mayores de edad (particularmente hombres). En esta modalidad, los delincuentes utilizan páginas de adultos, donde se identifican para prestar servicios sexuales. Allí la víctima o usuario, entabla una comunicación con una pareja y accede a enviarle fotos de su cuerpo desnudo.
Luego este juego se revierte, cuando el delincuente logra acceder a las imágenes de su víctima, lo intimida y asegura que publicará sus fotos, y que, para no hacerlo, exige que le consigne una suma de dinero.
Fuente: Oficina de prensa Dirección Nacional Gaula Militares