¿Son las 21:30 horas del 17 de febrero del año 1984 y el silencio de la noche se interrumpe por una serie de explosiones y disparos contra un convoy militar que se desplazaba de Puerto Berrío, Antioquia, a Cimitarra, Santander?, relata uno de los libros escritos por el sargento mayor (r), Raúl Hernández Chavarro, que narra una cruenta experiencia del soldado bachiller Carlos Arana Medina, durante el conflicto colombiano.
Historias como esta han sido escritas por el SM (r) Hernández, las cuales nadie conoce, pero que gracias a su puño y letra salen a la luz, para que lectores, nacionales y extranjeros conozcan del arrojo y la valentía del soldado colombiano.
Y es que el amor por la escritura lo empezó a desarrollar en el Ejército Nacional, cuando las labores de inteligencia demandaban precisos análisis y reportes, pero sería durante la pandemia en 2020, que nacería la idea de registrar en el papel cientos de relatos aprendidos durante su vida.
Debido a la emergencia registrada por del covid-19, y por ende del extensivo y tedioso hacinamiento, don Raúl le narraba cuentos a su nieto, unos sacados de la imaginación y otros de la vida real. Esos relatos llagarían a oídos de un niño del apartamento de al lado que no podía evitar la curiosidad de escuchar las historias del sargento mayor.
Poco a poco, en medio de la pandemia, el rumor de un señor que relataba cuentos se fue regando con el voz a voz, hasta que, las narraciones finalmente tuvieron espacio y tiempo en uno de los lugares abiertos del conjunto residencial ubicado en Chía, Cundinamarca, donde alrededor de 15 niños, lograban reunirse, con tapabocas y cuidando la distancia, con la expectativa de hacer volar su imaginación.
De allí en adelante el militar, con buen uso de retiro, gracias también al apoyo de su hija decidió asistir a unos talleres de expresión y redacción en la Dirección de Veteranos y Rehabilitación Inclusiva - DIVRI, y comenzar a plasmar en un papel sus vivencias, tal es el caso de El destino marcado por el lorito gitano, una autobiografía que tiene como base y dato curioso una papeleta que predecía el destino de las personas, y que un ave traída a Colombia en una feria gitana entregaría a don Cándido Hernández, quien finalmente le daría en la mano a su hijo Raúl.
Esta historia, ocurrida en Guacamayos, Santander, su tierra natal, hace parte de su compilado que comprende más de 10 libros, entre los que se destacan también cuentos dirigidos para niños, todos estos ejemplares se encuentran en la plataforma digital El Libro Total, donde es uno de los más leídos.
Hoy día, el Sargento mayor continúa mostrando sus escritos, que además son transmitidos por generaciones, pues su nieta con 13 años de edad ya fue autora de un cuento uno de sus libros.
Finalmente, Hernández hace una invitación al personal en uso de buen retiro, ¿nosotros los militares cuando nos retiramos, no sabemos qué hacer, pero yo digo, que desde que están activos empiecen a escribir sus experiencias. Yo me mantengo muy activo, me han invitado a la feria del libro de Bogotá, el año pasado a la de Neiva y hace poco a la de Bucaramanga, el stand nuestro de Héroes de la nación, fue una sensación, la población civil veía que los militares no solamente escribíamos sobre milicia o estrategia sino cuentos para niños?.
Fuente: Ejército Nacional