“Me encontraba montando la hamaca para dejar listo mi punto de descanso, sin saber que el campo estaba minado, estaba por terminar cuando pisé una mina y lo único que recuerdo fue una explosión que me dejó inconsciente” relata el soldado profesional Nelson Ramírez, víctima de una mina antipersonal, e integrante del equipo de fútbol sala Club Héroes de Honor.
Nelson lidera este proyecto, el cual busca a través del deporte incentivar a los militares que han sido víctimas de dicho flagelo. Un oficial, dos suboficiales, 10 soldados profesionales y tres regulares hacen parte de este equipo, que hace más de tres años lleva solidaridad y esperanza por distintas canchas del país.
“No sé cuánto tiempo pasó para volver a ver y oír ya que perdí esos sentidos, cuando pude volver en sí mi primera reacción fue buscar mi fusil pero no lo encontraba, al momento que escuchaba una nueva explosión. Pensaba que estaba en medio de un combate y que lanzaban granadas pero no escuchaba el accionar de los fusiles estaba muy confundido, al ponerme en pie di el primer paso y volví a caer”, relata Ramírez.
El cuatro de febrero de 2008 este héroe de la patria se encontraba junto con su compañía realizando maniobras de presión ante la presencia del frente 15 de las antiguamente denominadas Farc, ahora convertidas en partido político, en zona rural de la vereda la Holanda, municipio de Montañitas, Caquetá, cuando infortunadamente accionó un artefacto explosivo causando la pérdida de parte de su pierna derecha.
Después de ser atendido por un enfermero de combate, fue llevado a un hospital en Florencia, Caquetá, pero un nuevo inconveniente surgiría y fue su tipo de sangre, AB positivo, del cual no se encontraban reservas, por lo que fue trasladado a Bogotá donde recibió la atención necesaria.
Poco tiempo después Nelson inició su proceso de recuperación, encontrando en el deporte un aliciente para su vida, convirtiéndose en un gran atleta, y con disciplina y perseverancia lograría ir a dos Juegos Nacionales Paralímpicos.
Otro ejemplo de vida es el cabo segundo John Edison Garzón Palacios, también integrante del Club Héroes de Honor, “fueron momentos de combate, íbamos a hacer un registro en la vereda El Tigre, Caquetá. Lastimosamente por el lugar donde transitábamos nos habían minado, pisé una, pierdo toda la parte del talón derecho” afirma este suboficial, quien hoy en día concentra gran parte de su vida en la práctica del futsal.
“Me ha ido bien, me ha ayudado a movilizarme mejor, a tener buenos movimientos y control de la prótesis. Soy amputado del miembro derecho, entonces en mis movimientos me esfuerzo más hacia el lado donde tengo la prótesis para que sea una constante y se sienta que es parte mía, como si no hubiera perdido nada, pero en sí me ha dado dominio, manejo, equilibrio y estabilidad, tanto familiar como personal”, puntualiza John, quien seguirá día a día dando pasos de esperanza con cada jugada.
En el Día Nacional de la memoria y la solidaridad con las víctimas el Ejército Nacional continúa realizando labores en beneficio de aquellos héroes que con lucha y dedicación lo han dado todo por Colombia.
Fuente: Ejército Nacional