En desarrollo de diferentes operaciones de control marítimo las Unidades de la Armada de Colombia interceptaron dos embarcaciones en las cuales narcotraficantes y delincuentes de un grupo Armado Organizado Residual, transportaba 646 kilogramos de clorhidrato de cocaína, armamento, combustible y equipos de comunicación.
El primer hecho se produjó en cercanías al río Orpua, en el departamento del Chocó, cuando una aeronave del Grupo Aeronaval del Pacífico, adscrito a la Fuerza Naval del Pacífico, realizaba patrullajes aéreos y detectó una embarcación sospechosa. La aeronave realizó sobrevuelos sobre la lancha, notando que transportaban varios bultos y combustible. Los tripulantes de la lancha, al notar la presencia de la aeronave realizó maniobras evasivas tratando de huir, sin éxito alguno.
El personal militar de la aeronave obligó a la lancha a emplayarse, posteriormente aterrizó y realizó la incautación del alijo y la captura de los tres sujetos de nacionalidad colombiana, transportándolos a bordo hasta el puerto de Buenaventura, en el Valle del Cauca, donde las autoridades determinaron que los paquetes contenían clorhidrato de cocaína, con un peso de 646 kilogramos.
Unidades de Guardacostas recuperaron la embarcación e incautaron 780 galones de gasolina, equipos de comunicaciones e información de gran relevancia. Los sujetos y el material, fueron puestos a disposición de las autoridades competentes.
De acuerdo con información de inteligencia naval, se pudo establecer que el alcaloide avaluado en más de 21 millones de dólares, habría salido del río Micay, en el departamento del Cauca y tenía como destino Centroamérica.
Por otra parte, fue detectada por una aeronave de la Fuerza Naval del Pacífico, en el sector de Isla Ají en Buenaventura – Valle del Cauca, otra embarcación tripulada por tres sujetos que al notar la presencia de las autoridades, se emplayaron y dieron a la huida abandonando la lancha. Durante la inspección de las tropas en tierra, fue hallado en su interior, una pistola Pietro Beretta 9 milímetros, un proveedor para fusil, 41 proyectiles y 157 vainillas de diferentes calibres, que al parecer pertenecían al Grupo Armado Organizado Residual Jaime Martínez.
En menos de una semana, la Armada de Colombia ha incuatado 2.671 kilogramos de clorhidrato de cocaína, evitando que cerca de 89 millones de dólares ingresaran a las organizaciones narcotraficantes.
La Armada de Colombia continuará su ofensiva en contra de las organizaciones al servicio del narcotráfico, con el fin de bloquear sus corredores para el transporte de sustancias ilícitas y así debilitar las arcas de estos grupos ilegales generadores de violencia.
Fuente: Fuerza Naval del Pacífico