Como una muestra de apoyo y solidaridad, las tropas de la Brigada No.31 beneficiaron a cerca de 300 personas de la comunidad indígena en la vereda San Francisco.
Una de las múltiples misiones del soldado es llegar mediante la Acción Integral y Desarrollo a todos los sectores para brindar actividades culturales y de esparcimiento y sana convivencia; esta vez, el mismo comandante de la Cuarta División del Ejército Nacional, mayor general Antonio María Beltrán Díaz, volvió hasta la vereda modelo para decirles a líderes y lideresas indígenas, a jóvenes, adultos mayores y niños que el Ejército siempre estará ahí para llegar no solo con seguridad y protección, sino para extender una mano ante sus necesidades.
La vereda San Francisco es una zona apadrinada por los soldados de la Trigésima Primera Brigada, a la cual se le conoce como Vereda Modelo, y en la que el Ejército busca darle continuidad a la estrategia con la que se focaliza el esfuerzo a través de la Acción Unificada del Estado para mejorar las condiciones de vida de esta población vulnerable. El año anterior, el alto oficial también había visitado esa misma comunidad indígena, y en esa ocasión compartió una chocolatada hecha por los mismos soldados quienes, en una cocina improvisada, como lo hacen en el área de operaciones, demostraron una vez más su respaldo y respeto a su cultura.
“Es común para esta comunidad recibir la visita de al menos una vez por semana de los soldados, quienes se las ingenian para no descuidar a su vereda modelo. Esta comunidad nos inspira no solo respeto, sino cariño. Mientras estábamos junto al comandante de la Brigada No.31, escuchaba a la comunidad decirme lo importante que para ellos es el Ejército, y eso me llena de total orgullo, no solo por ser su comandante, sino como un soldado de la patria que sale motivado a seguir dando más por el bienestar de las comunidades”, agrego el mayor general Beltrán.
En su visita, el alto oficial también saludo a los soldados del Batallón de Infantería de Selva No.30, quienes continúan las tareas de Apoyo a la Defensa de la Autoridad Civil sobre la ribera del río Vaupés, principalmente en frontera con Brasil, e hizo un reconocimiento a su labor, además destacó lo importante que son como integrantes de la familia del Ejército.
La motivación de las tropas y la percepción directa del comandante hacen parte de la verificación del estado anímico y físico de las tropas, ya que es valioso tener soldados íntegros que estén bien, para dar lo mejor de sí en el cumplimiento del deber constitucional.
Fuente: prensa – Ejercito Nacional