Dentro de los especímenes que fueron reubicados se encontraban reptiles, roedores y aves, todas ellas amenazadas por el tráfico ilegal de fauna silvestre en la región de la Amazonía colombiana.
En inmediaciones del Fuerte Militar de Larandia en el departamento de Caquetá, soldados del Ejército Nacional, con apoyo de la Corporación para el Desarrollo Sostenible del Sur de la Amazonía - Corpoamazonía, llevaron a cabo la reubicación de una serie de animales silvestres que habían sido recuperados y puestos bajo el cuidado y la protección de entidades encargadas de estudiar este tipo de especies en vía de extinción.
Dicha actividad fue posible gracias al acompañamiento realizado por el Ejército Nacional y la Policía Nacional, bajo la supervisión de profesionales especialistas en el tema. Los animales habían tenido que ser albergados durante un tiempo en el Hogar de Paso para Fauna Silvestre, ubicado en la granja experimental Santo Domingo de la Universidad de la Amazonía, en el municipio de Florencia, Caquetá.
Entre las especies que fueron reubicadas se encuentran: una boa arcoíris, cuatro borugas, dos guaras, un chigüiro, cuatro morrocoyos de patas amarillas y una lechuza, que volvieron a su hábitat para ser libres.
Este trabajo se ha venido desarrollando desde hace cuatro meses en torno a la Operación Mayor Artemisa, la cual tiene como misión, velar por la protección y preservación de la flora, la fauna, el agua y la biodiversidad existentes en el suroriente colombiano, donde confluyen una gran cantidad de especies que se han visto amenazadas por culpa de manos ilegales, que pretenden lucrarse con el tráfico de estos animales que representan, para los criminales, grandes sumas de dinero, las cuales afectan sigilosamente el ecosistema presente en la Amazonía colombiana.
El Ejército Nacional seguirá desarrollando este tipo de apoyos, encaminados a contribuir con la recuperación del equilibrio de los entornos naturales, las especies de animales y vegetales que habitan en ella, las cuales garantizarán la calidad del aire y del agua para las futuras generaciones de seres humanos.
Finalmente, todas estas acciones seguirán obedeciendo a los lineamientos establecidos en el marco de la Constitución y la ley, para garantizar principalmente el derecho a la vida y así mismo, aportar a la consecución de nuevas normativas que regulen y castiguen severamente a quienes incurran delitos medioambientales.
Fuente: prensa – Ejército Nacional